Es costumbre celebrar de forma especial los aniversarios "redondos". De este modo las personas humanas y todo tipo de organizaciones; incluso las inhumanas, echan la casa por la ventana al cumplir determinados años llegando incluso a nombrarlos de forma especial, como por ejemplo las bodas de plata (25), oro (50) o diamante (75).Lo normal en estos casos es programar actos relacionados con la persona o institución homenajeada. Un equipo de fútbol lo celebra con un partido, una peña con una comida y posterior salida con txaranga, un torero con una corrida, una orquesta con un concierto y un matrimonio con una nueva luna de miel.
Hoy, 31 de julio festividad de San Ignacio de Loyola (¡qué casualidad!) Euskadi ta Askatasuna celebra su 50 aniversario. Para no salirse del guión lo celebra con una de sus especialidades, la bomba.
Lo que diferencia esta conmemoración del resto es que el programa de actos es secreto, que los participantes lo son en contra de su voluntad y que las celebraciones suelen ser actos positivos y motivo de alegría. Desde luego el balance de la banda no es como para echar cohetes (y nunca mejor dicho).
En langostinos y lentejas hemos decidido NO sumarnos a semejante ceremonia y queremos recordar a la Junta Directiva de la organización que la verdadera FIESTA empezará el día en que la violencia desaparezca de nuestras vidas.
Nota: Ya sabemos que también hay otras violencias, que también denunciamos, lo que está claro es que cada uno / una es responsable de sus actos.
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