Crisis

En los últimos tiempos no se habla de otra cosa, bueno sí de la gripe A. En langostinos y lentejas no queremos dejar pasar por alto alguna de las últimas noticias de esta semana.

El martes por la mañana el Presidente del Gobierno de Navarra, gracias al PSN, expulsó a los consejeros del CDN, Pérez Nievas y Esparza por intentar, aunque tarde y mal, cumplir con lo que debían al mostrarse favorables a la modificación de la Ley del Vascuence y permitir incorporar a la zona mixta, a las localidades de Aranguren, Galar, Noáin y Beriáin, siempre que sus respectivos ayuntamientos lo aprobasen por mayoría absoluta. Todo un ejemplo de talante democrático y de respeto a la voluntad de los navarros; salvo si se vuelven locos.


El Gobierno de España presentó los presupuestos generales para el año que viene. Sin entrar en analizar otras partidas ya que lo nuestro no es la economía, justo-justo llegamos a fin de mes, nos llama la atención un dato repetido en los mass media hasta la saciedad. LA CASA REAL SE CONGELA EL PRESUPUESTO. Un ejemplo más de los sacrificios que hace esta familia por los egpañoles ya que va intentar pasar el año con unos miserables ocho coma nueve millones de euros. Se ve que la cosa es grave ya que el bribón patrón del borbón (¿o era al revés?) ya ha empezado a ahorrar en gilettes.

Dentro de la crisis financiera también hemos conocido el ERE del BBVA que ha llevado a la prejubilación al número dos de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri. Otro pobre desgraciado que las va a pasar canutas. Al pobre hombre de 55 años de edad lo han mandado a casa con un sueldo congelado de tres millones de euros anuales y va a tener que esperar a cumplir los 65 para poder hacerse cargo de su plan de pensiones que en este momento asciende, y subiendo, a 52,4 millones de euros. Una minucia para un banco que ha cerrado el grifo de los créditos y no tiene escrúpulos para embargar el piso a quién no les pague las cuotas. ¡Y eso que los que han originado la crisis han sido los banqueros!

Como podéis apreciar la crisis no sólo afecta a los currelas ya que las listas del paro aumentan cada día también entre los políticos, vagos y maleantes. Aquí no se libra ni Dios.